Día de lluvia.

lAmanece y no hay ninguna claridad...la tormenta va llegando de a poco, sonora, con sus voces que alarman-nun, ca me gustaron las tormentas, les tengo miedo-ya nos hemos levantado y Juan Pablo anada de aquí para allá, agitado-a él tampoco le hacen mucha gracia los estruendosos sonidos-así es que, me doy cuenta que va a ser una mañana un poco más difícil...a las 3 de la tarde llega Gabriela, la acompañante. Creía que no iba a venir, por el tiempo....la primera mirada de Juan Pablo hacia ella es de desconfianza..va dando vueltas alrededor, se acerca, retrocede, ella saca como sin querer unas láminas, él les da una ojeada,se sienta, se para, me pide café, le sirvo, me pide mate, y, LE SIRVE UNO A GABRIELA. Luego, se acomoda en la silla, y va ordenando las láminas, armando rompecabezas,y la mira...cómo la mira! va pasando la tarde y maestra y alumno se van concentrando en su quehacer...mis miedos se han esfumado, JUAN PABLO HA EMPEZADO A TRANSITAR EL CAMINO. Gabriela es psicopedagoga, trabaja con chicos como mi hijo-más chicos-...tiene algo, serenidad, sencillez...no sé...yo me hacía mil preguntas-mi hijo es un autista adulto-todo fué tan bien! mañana,la va a esperar, está encantado con ella, la verdad, lo conquistó de una. Doy gracias por esta tarde donde conocimos a alguien tan especial.