LAS PALABRAS DEL DOCTOR

Seguí mi vida criando a mis hijos. Traté de dejar "el descubrimiento"archivado en un lugar de mi mente. Para ver a mi hijo pequeño, sin avisos, sin condicionamientos. No quería que lo que "sabía" yo, alterara mi actitud hacia él.Cuando cumplió 11 meses, lo llevé al Dr pediatra. Al Dr Chabrillon. Un médico que todos-en Concordia-consideran y con razón EL DOCTOR por todo lo que él es humana y profesionalmente. Y le hablé de mis temores. Y le pregunté: vos creés que este nene es normal? Él llamó a Juan Pablo por su nombre. El nene ni se movió. Siguió mirando hacia qué? Le trajo juguetes. A los que Pablo palpó para dejar caer luego. Entonces el Dr-detrás del niño-empezó a desenvolver un paquete de galletitas. Ahí, sí, Pablo volteó hacia él. El Dr se lo quedó mirando, mientras Juampi comía masitas. Mirá, me dijo, yo no sé si tu nene es autista, pero, conviene hacer un estudio neurológico completo. Llegué a mi casa, sabiendo ahora, que sí, que NO ME EQUIVOCABA. Y que sí, había problemas. Exámenes médicos. Pra mí, inaccesibles. Yo no tenía ni siquiera una obra social. Traté de que mi marido, David, me escuchara. Era inútil. Para él eran fantasías. Por Dios-me decía-un nene tan hermoso, tan sano! Volví a lo del Dr. Lo que él me dijo fué una conmoción para mí. Usá la obra social del padre, es su hijo, también. Lo que él me estaba diciendo, de lo que me estaba ENTERANDO, bueno era de la Obra Social del Ejército. Y ésto era, iba a ser, es un poco todavía, algo complicado. Por decirlo suave. Creo que merece otra entrada.