Un día, un momento

Un día, un momento
María, la autora

jueves, 26 de enero de 2012

JUAN PABLO Y SU LUGAR

 Así es que nos habíamos quedado como absortos con las actitudes de Juan Pablo. Ese viaje (para mí al menos) ese corto viaje por la Panamericana era un hito demarcatorio. El otro día igualmente fuí a verlo y a dejar algunas cosas(estamos respetando su deseo que según se ve es no vernos) y estaba dormido. Había que probarle un calzado así es que la auxiliar lo trajo ya con las sandalias puestas. Ahí me vió y me miro como asombrado. después se marchó hacia afuera. Mas la joven insistía que me saludara. Vino, y me dió un beso como un "escopetazo. Ja ja me "pegó" con el beso. Y se quedó mirándome. Como se hace con alguien curioso, llamativo. Pasamos un rato así hasta que entró adonde estban las bolsas que yo había llervado, me las alcanzó y me señaló la puerta de salida. La chica lo reprendió, le decía mamá, es mamá, te trajo esto, te vino a ver. Pero él quería que me fuera. Así es que  lo miré para grabarme esa estampa tan graciosa, tan bella y me fuí retirando. Ya afuera ví cómo espiaba y al ver que me encaminaba hacia el auto que me había llevado se dió la vuelta regresando al interior. Sé Juan Pablo que sos feliz ahí, que, estás en paz. Voy a esperar que quieras verme. Igualmente cuando pueda Cecilia(con ella no está enojado lo ví el otro día reir con ella en la ida al Hospital)vamos juntas. Sé que juega que disfruta la piscina que pasea incansable por ese predio. Sé que está bien. Quizás la distancia de los afectos lo mantenga en calma.Quizás. Lo que me cuentan de él del día a día es muy bueno. Y sé que no mienten por detalles que yo sólo conozco. Confío en el luigar y su gente. Y, bien, un hijo a esa edad ya ha marchado del hogar paterno. Y sí somos las madres las que siempre los extrañamos.Es así.

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