UN SUEÑO A CUMPLIR A MEDIAS

El martes nos vamos con Cecilia a Chile. Son sus vacaciones y es su elección.Desde que conoció Chile se quedó prendada de tanto geográfico esplendor. Vamos a ir a donde yo nací. A Chillán. Y a Dichato. Sí, la playa del tsunami. Que ya está de nuevo en pie con toda su belleza para ofrecerla a quien quiera pisar esa blanca arena. Era mi sueño llevar a mis niños(cuando lo eran) a ese lugar que fué escenario de mis juegos de mi niñez. A mí me parecía lo más bello que hay en el mundo. Una sensación de infinitud, de estar mirando TODO!  lo que existe me tomaba la mente. Fuí muy muy feliz en aquellas lejanas(en el tiempo) mañanas tardes y noches de mi existencia.Habíamos pensado que por fin! íbamos a llevar a Juan Pablo.Más, ya he contado su fobia?! a viajar tan siquiera unos minutos en auto. La carretera, el camino siempre cambiante lo aterra.Hablando con el Dr me dice que vamos a tener que armarnos de paciencia y en un modo gradual hacerle perder ese miedo.Me voy alegre y triste. Por un lado Ceci va ver al fin!(la otra vez no hubo tiempo) esas aguas y arenas "mágicas" de las que tantas historias le he contado. Más mi Pablo no va a estar. Quisiera traerle ese tesoro ese lugar encantado aquí.Al menos le traeré los caracoles de mis recuerdos-han de existir aún-y bueno, es algo. He de poder terminar de cumplir ese sueño. Porque siempre he pensado que la dicha CURA. Lava, limpia el alma de oscuridades. Te traeré Dichato en mis manos Juan Pablo.