Siempre me gustó escribir. De cómo lo hago, bueno, eso ya es otro cuento. A veces -ni falta que me lo digan-me sale pésimo. Otras, por una rara alineación de mi mente con el mundo en que vivo, bastante, diría, agradable.Todo comenzó con querer hacer una denuncia de las perrerías que cometía la obra social, problema lamentablemente generalizado.Era casi un grito pidiendo ayuda.Parece que alguien se hizo eco. Pues, las cosas, amigos, empezaron a cambiar.Para bien.Y Juan Pablo se fué beneficiando de esta tardía, más siempre bienvenida disposición de su O.S. Al mismo tiempo de escribir acá, disparaba dardos-en forma de notas-a el Ente(O.S). Mientras, acá, fué como haber entrado a un club, donde para ser admitido, debíamos contar con un hijo/a con autismo.He tenido momentos felices leyendo otros blogs, he arrugado la frente cuando algunos de "mis colegas"daba por sentado que el tratamiento B o C terminaba con el autismo! He disfrutado con las historias de Sarah-que sí sabe escribir-. Y he contado mi vida que, a nadie debió ser contada si no fuera porque existe un joven que la hace única,hasta noble.Como lo son las vidas de muchos que conozco personalmente y de acá. Este medio muchas veces fué lo que sostenía en pie.Las noticias del autismo! razón de vida, voluntad de seguir en este imperfecto, más, único mundo. Hemos reído a los gritos con una amiga cuando yo le contaba que tenía un blog"de pobres". Me refería a lo improvisado, a lo bizarro, a mi torpeza con las fotos o graficaciones.Seguiré igualmente con esto. Quizás un día, pueda ofrecer un producto más digerible. Ahora, quizás, duerma un rato.
